Casos Clínicos: Tratamiento para Alopecia Universal
NUEVOS FÁRMACOS INMUNOSUPRESORES ESPECÍFICOS PARA EL TRATAMIENTO DE ALGUNAS ENFERMEDADES DEL CUERO CABELLUDO
Nuevos fármacos, ya aprobados en U.S.A (Federal Drug Administration) para su uso en enfermedades específicas que producen caída del cabello debido a un problema inflamatorio crónico han sido implementados en nuestra clínica.
Estos inhibidores inmunológicos son de acción más potente y efectiva que otros fármacos usados anteriormente para tratar estas mismas enfermedades, pero con muchos menos efectos colaterales de corto y largo plazo.
Su uso en algunos casos de alopecia areata refractaria a tratamientos previos y de presentación extensa ha sido un ejemplo de avance médico en los últimos años.
A) La paciente antes de ingresar al tratamiento con un fármaco inmunosupresor específico estaba siendo tratada con múltiples tratamientos orales e inyectables sin resultados.
B) Su cambio sólo se obtuvo después del uso de un tratamiento con un fármaco Inmunosupresor del tipo inhibidor inmunológico específico de la proteína Janus Kinase (nombre genérico) de los cuales contamos actualmente con varios tipos en el arsenal médico terapéutico.
C) Su tratamiento actual ha permitido disminuir dosis y dar el tratamiento en forma fraccionada sin tener ningún efecto secundario en la paciente.
PACIENTE CON ALOPECIA UNIVERSAL TRATADA EN NUESTRA CLÍNICA RC CON MEDICAMENTO TOFACITINIB
Antes
Marzo 2023
Después
Octubre 2024
PACIENTE CONSULTA A CLÍNICA RC POR EXTENSA ALOPECIA AREATA REFRACTARIA A TRATAMIENTOS PREVIOS
Antes
Marzo 2024
Pretratamiento
Pretratamiento
Pretratamiento
Pretratamiento
Pretratamiento
Pretratamiento
Pretratamiento
Pretratamiento
LA PACIENTE RECIBE TRATAMIENTO CON INHIBIDORES JAK (TOFACITINIB) EN CLÍNICA RC MOSTRANDO REPOBLAMIENTO CAPILAR COMPLETO EN 13 MESES
Despúes
Enero 2025
Post tratamiento
Post tratamiento
Post tratamiento
(Pacientes autorizan a su médico tratante (Dr. Raúl Cabrera) la publicación de estas fotografías mediante consentimiento explícito firmado.)
Mi experiencia con la alopecia areata y el tratamiento con tofacitinib
Soy paciente del Dr. Raúl Cabrera desde marzo de 2024, después de haber recorrido diversos dermatólogos y tratamientos a lo largo de los años. Mi historia con la alopecia areata comenzó a los seis años, cuando experimenté la pérdida de cabello en pequeñas zonas, lo que se repitió a los 12 años. En ambos episodios, el tratamiento consistió en inyecciones intralesionales de corticoides, que dieron buenos resultados. Sin embargo, tras muchos años de estabilidad, en febrero de 2021, 25 años después del último episodio, la alopecia se activó nuevamente.
Recurrí al mismo dermatólogo que me atendió en mi niñez, quien prescribió el mismo tratamiento de corticoides de esos tiempos, obteniendo buenos resultados en algunas zonas. No obstante, con el tiempo aparecieron nuevas placas en diferentes partes del cuero cabelludo, por lo que decidí consultar con un especialista en alopecia en Santiago, quien me indicó minoxidil oral y crema para las placas, pero la alopecia continuó avanzando, durante tres años, visité a cuatro dermatólogos diferentes, todos con tratamientos similares: minoxidil, dacam y, como última opción, sensibilización con difenciprona, lo que fue una de las peores experiencias. Ninguno de estos tratamientos resultó eficaz, cada dos meses viajaba desde Punta Arenas a Santiago, solo para descubrir que, en cada control, aparecían nuevas placas.
Luego del fracaso con estos tratamientos, dos dermatólogos mencionaron el medicamento baricitinib, sin tener experiencia suficiente ni conocimientos profundos sobre su efectividad, lo que generaba incertidumbre, especialmente por su alto costo. Mientras me encontraba evaluando este tratamiento, descubrí en Instagram la cuenta de Gaby (@alopeciaareata.chile), quien compartía su testimonio. Decidí escribirle, contándole mi historia, y fue ella quien me recomendó al Dr. Raúl Cabrera.
Solicité una consulta con él de inmediato y desde ese momento, todo cambió. El Dr. Cabrera diagnosticó mi alopecia como severa, al escuchar esto, temí sobre la posibilidad de que progresara hacia una alopecia universal. El 12 de abril de 2024, inicié el tratamiento con tofacitinib. Aunque los primeros meses no fueron tan prometedores como esperábamos, en agosto el doctor aumentó la dosis a 30 mg, lo que marcó un cambio significativo. En los siguientes meses, pude observar un crecimiento notable del cabello en todas las placas. A los nueve meses, ya no quedaban rastros de alopecia, y lo más importante: mi tolerancia al medicamento fue excelente, sin ningún síntoma adverso.
Recomiendo sin dudarlo al Dr. Raúl Cabrera, quien ha sido un profesional excepcional en mi tratamiento. Su conocimiento y dedicación fueron fundamentales en mi recuperación. Asimismo, el tratamiento con tofacitinib ha mostrado resultados sorprendentes en mi caso, y, en mi experiencia ha sido una opción eficaz y bien tolerada.
La alopecia afecta profundamente la autoestima, la pérdida de cabello puede generar inseguridad y ansiedad, pues no solo afecta la apariencia física, va más allá de lo estético, uno transita con emociones como la frustración, tristeza y vulnerabilidad, y como frecuentemente asumen que el origen es por estrés, uno se cuestiona profundamente. La necesidad de esconder las placas y la constante preocupación por los nuevos brotes se convirtió en una carga emocional, este proceso me ha enseñado la importancia de buscar ayuda profesional, de ser paciente con uno mismo y de no rendirse.
28 de Enero de 2025
Un día del 2017 noté algunos espacios vacíos en mi cabellera, en el contexto de un gran estrés laboral. En un inicio fueron pocos, por lo que no entré en pánico en seguida, se mantuvo así un par de años y durante todo ese tiempo estuve en controles con diferentes dermatólogos sin encontrar alguno que diera solución a mi problema. El 2020 se intensificó de tal forma que perdí gran parte del cabello, siendo diagnosticada oficialmente con Alopecia Areata Universal.
A esta altura, lo único que deseaba era encontrar una solución efectiva, y a algún profesional capacitado que me pudiese ayudar.
Buscando y buscando llegué a la Clínica RC, dónde el Dr Raúl Cabrera me propuso diferentes tratamientos, los cuales fuimos probando uno a uno sin un gran avance (corticoides inyectables, minoxidil, metrotrexato, entre otros). En una de las atenciones, y al ver que ningún tratamiento daba resultados que se mantuvieran en el tiempo, el doctor me comenta que había estado pensando en mí, en mi problema, que había leído sobre un medicamento novedoso en otros países que podría quizás ser el indicado, que solo lo había usado anteriormente con un paciente con psoriasis generalizada, pero que era costoso (y no mentía). Tras años viviendo con la pérdida de cabello y lo que aquello implicó en mi vida, yo le dije: vamos, hay que intentarlo, yo me las arreglo para poder comprarlo.
En junio de 2021 comencé a tomar Tofacitinib, al poco tiempo empecé a ver resultados positivos por lo que no desistimos con el tratamiento. Fue un proceso largo, lleno de incertidumbre, no fue fácil pero valió la pena todo el esfuerzo, los cambios de hábitos, los cambios en el entorno laboral, puesto que hoy puedo decir que tengo el cabello largo y sano.
Para concluir, me parece importante decir que para obtener un buen resultado, es fundamental ser paciente, perseverante, constante y estar comprometida con el proceso, pero sobre todo, confiar en tu tratante y mantener una buena relación médico-paciente, en mi caso, al mantener una buena comunicación y encontrarnos en la misma sintonía, todo el proceso se sintió más llevadero.
Historia aparte: después de un tiempo ya de atenderme con el doctor, descubrí que su padre fue mi pediatra.
Gabriela Meza